Homicidios y enfrentamientos recrudecen en arranque de proselitismo; ataques se ensañan con policías estatales.
Guanajuato, 10 de abril (Pop Lab).- Sergio, menor de edad; 17 años. Medía 1.60 de estatura. Cabello negro. Un tatuaje en uno de los antebrazos. En la foto de selfie usa gorra, playera y chamarra azules.
Sus señas se repetían en la ficha de Alerta Ámber que por su desaparición (ocurrida el domingo 4 de abril) en su natal Yuriria, fue publicada y replicada el lunes a las 17:00 horas.
Para ese momento, el proceso electoral en el territorio guanajuatense ya hervía. Decenas de candidatas y candidatos a las presidencias de los 46 municipios habían iniciado campañas; sus videos inundaban las redes sociales, plataformas digitales como WhatsApp repetían y repetían fotos en plazas, recorriendo calles, levantando el brazo; circulaban ya los comunicados de prensa, agendas…
La señal de arranque estaba dada. No para todos aún, por registros denegados y planillas condicionadas a cumplir el principio de paridad de género, según las resoluciones del consejo general del Instituto Electoral del Estado de Guanajuato (IEEG), pero al fin y al cabo, ya en campaña.
Unas horas después de ese inicio, Sergio fue encontrado. Su cuerpo sin vida, atrozmente exhibido, fue abandonado en una calle de Yuriria, al paso de la gente, en la mañana del martes.
El adolescente se sumó a las 15 víctimas de asesinatos violentos del martes. Con ellas, alrededor de 27 personas perdieron la vida de la misma manera en las primeras 48 horas de campañas, del activismo interesado en el voto de una población vapuleada por la inseguridad desde hace meses, años.
El nombre de Sergio queda también en el funesto registro de menores asesinados en Guanajuato que lo antecede: sólo de enero a marzo eran ya 12 las víctimas, de acuerdo con el conteo de la organización Causa en común, en su informe de atrocidades nacionales entre enero y marzo de este año…que encabeza Guanajuato, faltaba más.
Mientras Sergio estaba desaparecido para su familia en Yuriria, en León el panismo hacía eco de las palabras de su dirigente nacional, Marko Cortés, quien trataba de convencer (se) de que la inseguridad no es un problema exclusivo de Guanajuato, sino de todo el país, y advertía a sus correligionarios que este tema será usado por sus adversarios políticos en la disputa por los votos.
Pues cómo no. El entorno para los guanajuatenses se mantiene sumergido en ataques contra negocios, policías, ocupantes de viviendas particulares y la permanente confrontación entre los grupos criminales que manifiestan a sangre y fuego su presencia en la entidad.
LAS VIDAS CEGADAS
El lunes, primer día oficial del proselitismo que apunta al 6 de junio, estos fueron algunos de los hechos fatales desatados en distintos puntos del estado, donde ya convive la promesa de campaña y la propaganda de candidatos y candidatas en anuncios espectaculares y calcomanías, con la de los grupos delincuenciales en cartulinas colocadas junto a sus víctimas, y mantas en las que amenazan a sus contrarios y a fuerzas policiacas.
En los días recientes, diversos eventos apuntan a una nueva embestida contra elementos de las Fuerzas de Seguridad Pública del Estado.
En uno de los embates más graves ocurridos hasta ahora, dos elementos de esa corporación policiaca murieron y dos más fueron heridos, tras ser objeto el lunes de un ataque por civiles armados cuando se encontraban en el exterior de un domicilio en la colonia Lázaro Cárdenas de Irapuato.
Aparentemente, los agentes resguardaban a un comandante de la corporación. Los mensajes que en sitios públicos se han dejado apuntan al Grupo táctico de las FSPE y a su comandante entre los amenazados.
Este ataque ocurrió poco antes de las 5 de la mañana del lunes. Apenas el pasado miércoles, otro elemento de la misma corporación estatal fue privado de su libertad y asesinado en Los Rodríguez, en Silao.
La colonia Emiliano Zapata de Irapuato fue el punto donde los FSPE en tres patrullas presuntamente resguardaban un domicilio, cuando civiles en varias camionetas llegaron a dispararles.
El enfrentamiento duró más de media hora, según testigos. En el lugar fallecieron dos de los elementos y otros dos resultaron heridos.
En el comunicado oficial, la Secretaría de Seguridad Pública del estado ubicó el enfrentamiento en la colonia Lázaro Cárdenas, y afirmó que éste ocurrió mientras los elementos de las FSPE efectuaban patrullajes y “sin motivo aparente fueron agredidos por un grupo de civiles armados”, por lo que respondieron a dicha agresión.
“Al cese al fuego, tres de los presuntos responsables fueron abatidos en el mismo lugar del ataque, contándose con el apoyo de la vigilancia aérea para reforzar el operativo”.
La SSPE informó que fueron aseguradas dos armas largas, chalecos balísticos con la leyenda de un grupo delictivo y una camioneta Suv gris blindada.
Sobre este y los más recientes atentados contra los agentes de las FSPE, el gobernador Diego Sinhue Rodríguez dijo en una entrevista en la capital del estado que obedecen “al trabajo que hacen, caen en cumplimiento de su deber… estos ataques intentan amedrentar el trabajo de la Policía”.
Sin referirse a ‘los otros caídos’ -menores, mujeres, familias, comerciantes- el gobernador destacó la confiabilidad en las fuerzas estatales, “es la segunda policía más confiable de todo México”.
Diego Sinhue incluso habló de la posibilidad de empujar, a través de la Conago o del Grupo de gobernadores de Acción Nacional (el GOAN) una reforma legislativa que permita a los elementos de corporaciones, particularmente a los mandos o integrantes de grupos especiales (como el Grupo Táctico de las FSPE) portar sus armas en sus días francos o de descanso.
“Sabemos que es difícil porque la licencia colectiva del Ejército tiene algunas restricciones, pero es algo que se tiene que volver a plantear, es un tema del Congreso federal”.
También anunció que en próximos días, los titulares del INE en el estado y del IEEG participarán en la mesa estatal de seguridad para revisar las circunstancias en las que se brindaría seguridad a aquéllas candidatas y candidatos que la pidan o la necesiten, lo que se resolverá a través de la secretaria de gobierno, Libia Denisse García Muñoz Ledo.
El mismo lunes -horas después de la agresión contra los FSPE- María Antonia, delegada de la comunidad de Roque, perteneciente a Celaya, moría asesinada en las oficinas de la delegación. Los responsables entraron al inmueble, le dispararon y huyeron sin ser detenidos.
Es la segunda Delegada Municipal de la región que es asesinada en menos de cinco meses.
La capital del estado no estuvo exenta de siniestros. Una casa del barrio de Pueblito de Rocha fue incendiada intencionalmente, después de que su fachada fue rafagueada. Una versión refiere que un hombre -otro agente de las Fuerzas del estado- murió en el lugar, pero esto no fue ni informado, ni confirmado por la Fiscalía o la propia Secretaría de Seguridad del estado.
Martes. Segundo día de campañas. El temor ya rutinario frente al transcurrir del día:
La ciudad de Celaya amaneció nuevamente con cadáveres descuartizados en distintos puntos de la ciudad.
Por lo menos dos cuerpos fueron abandonados en la madrugada, en puntos del acceso poniente, por la carretera Panamericana.
Un hallazgo fue hecho a la altura del Motel Mónaco, en el sentido de la carretera Querétaro-Celaya, y el otro en el sentido opuesto, ya entrando a Celaya, cerca de la glorieta de la Pepsi.
Desde el 31 de marzo a la fecha, casi a diario los celayenses se han topado con estas escenas.
En la misma ciudad, un ciclista fue asesinado en la entrada del fraccionamiento Los Mezquites.
En la misma región Laja-Bajío, tres personas fueron asesinadas en un ataque a una cachimba en la carretera Panamericana en Apaseo el Alto; entre las víctimas están dos mujeres, presuntamente la propietaria y una empleada.
La tercera víctima era un trailero que se encontraba comiendo en el local.
Ya por la tarde, en el mismo Apaseo el Alto otra mujer fue víctima de homicidio. Vecinos de la colonia El Rejalgar avisaron a la policía que escucharon disparos. La encontraron en la calle, por donde aparentemente caminaba cuando le quitaron la vida.
En Yuriria, además del menor Sergio se sumaron otras tres víctimas de asesinato, en tres distintos eventos.
Un hombre fue ultimado en la calle Albores de la colonia La Aldea, en los primeros minutos del día. Cerca de las 7 de la mañana, dos hombres fueron asesinados en un camino entre las comunidades de Rancho Viejo y Casacuarán, en ese mismo municipio.
En otro punto del estado, León, tres personas habían sido asesinadas en el transcurso de la mañana y tarde del martes; dos de ellas en Loza de los padres, donde fueron abandonados dentro de bolsas de plástico; aparentemente se trata de dos mujeres.
Un poco más tarde, la tercera víctima fue asesinada en La Laborcita.
En este municipio, siete personas han perdido la vida de forma violenta entre el lunes y el martes.
En Salvatierra, un hombre fue acribillado en una esquina entre las calles Alhóndiga de Granaditas e Independencia.
Además, en Irapuato una mujer y su hijo fueron privados de su libertad, sacados violentamente de su domicilio en la calle San Cayetano de Luna, a donde llegaron policías tras recibir el aviso de disparos.
Encontraron la puerta forzada y la casa vacía.
La competencia se advierte feroz. Partidos y candidatos harán campañas, inmunes a la violencia, mientras los criminales mantienen oídos sordos a toda promesa de paz.